viernes, 6 de abril de 2012

Recalculando el rumbo, proa hacia el mañana

Se dice que una retirada a tiempo es una victoria. Probablemente es inteligente saber abandonar. No se puede pretender entrar a un puerto en cualquier condición, con cualquier viento, a cualquier precio porque lo más probable es que no llegues a entrar en él ... ni en ningún otro. En estos días he tenido que rendirme ante lo imposible y conformarme con mirar a lo lejos uno de los puertos señalados en mi carta de navegación. Ha sido doloroso, tanto como lanzar por la borda un trozo de corazón o de esperanza, que viene a ser lo mismo, pero había que hacerlo; no conviene olvidar que muchas veces es preciso el sacrificio de algo o de alguien para que todo lo demás continúe.
Vuelve a amanecer y sale el viento: todo está de nuevo en su lugar. Los otros puertos cada vez están más cerca y con la entrada más segura.

1 comentario:

  1. Llevo un tiempo queriendo volver a navegar, ¡aquí en madrid! Así que estoy buscando pantanos y embalses.... en todo este tiempo me he acordado de tí y de lo fácil que lo tendría en Cádiz. No sé si estoy en el sitio adecuado...
    Besotes

    ResponderEliminar